Misioneros y agentes de pastoral asesinados en el año 2024


«Podemos preguntar: ¿Cómo han conseguido sobrevivir a tanta tribulación? Y nos dirán lo que hemos oído en este pasaje de la Segunda Carta a los Corintios: “Dios es Padre misericordioso y Dios de toda consolación. Él nos ha consolado”».

Hemos elegido las palabras que el Papa Francisco pronunció en la Catedral de Tirana durante su Viaje Apostólico a Albania en 2014 para introducir el habitual informe anual de la Agencia Fides sobre los misioneros y agentes de pastoral asesinados en todo el mundo en 2024

Como es habitual, la lista anual de Fides no se limita exclusivamente a los misioneros ad gentes en sentido estricto, sino que considera las definiciones de “misionero” y “misionera” ampliando el horizonte para incluir a todos los católicos involucrados en obras pastorales y actividades eclesiásticas que han encontrado la muerte de forma violenta, aunque no siempre haya sido “por odio a la fe”.

Por esta razón, evitamos emplear el término “mártires”, salvo en su sentido etimológico de “testigos”, con el fin de no interferir en los juicios que la Iglesia pueda realizar a través de los procesos de canonización.

Números:

En 2024, según datos verificados por la Agencia Fides, han sido asesinados en todo el mundo 13 “misioneros” católicos, entre ellos ocho sacerdotes y cinco laicos. Una vez más, África y América encabezan este trágico registro, con cinco víctimas en cada continente En los últimos años, ambas regiones se han alternado en la cabeza de esta dolorosa estadística.

En concreto, en África han sido asesinados 6 hombres (2 en Burkina Faso, 1 en Camerún, 1 en la República Democrática del Congo y 2 en Sudáfrica), en América 5 (1 en Colombia, 1 en Ecuador, 1 en México y 1 en Brasil) y en Europa 2 (1 en Polonia y 1 en España).

Como demuestran los datos contrastados y verificados sobre sus biografías y las circunstancias de sus muertes, los misioneros y agentes de pastoral asesinados no estaban en el punto de mira por obras o compromisos llamativos, sino que trabajaban para dar testimonio de su fe en la cotidianidad de la vida diaria.

Las breves noticias y testimonios recogidos sobre la vida y las circunstancias que han rodeado la muerte violenta de estas personas nos ofrecen un retrato de su cotidianidad, en contextos particularmente difíciles, marcados por la violencia, la miseria, la injusticia. Son testigos y misioneros que han ofrecido la propia vida a Cristo hasta el final, de forma libre y por gratitud.

Entre los años 2000 y 2024, el número total de misioneros y agentes de pastoral asesinados asciende a 608. «Estos hermanos y hermanas pueden parecer fracasados, pero hoy vemos que no es así. Ahora como entonces, de hecho, la semilla de sus sacrificios, que parecía morir, germina, da fruto, porque Dios a través de ellos sigue obrando maravillas, cambiando los corazones y salvando a los hombres» (Papa Francisco, 26 de diciembre de 2023, fiesta litúrgica de San Esteban Protomártir).

Fuente: Especial Fides a cargo de Fabio Beretta