Agradeciendo al Señor por dos misioneros ad gentes
Obras Misionales Pontificias (OMP) Venezuela llevó a cabo una celebración eucarística en su sede como agradecimiento por la finalización de los dos años de servicio como misioneros ad gentes de los jóvenes laicos: Mileidy Linares y Alexander Robles, en el Vicariato apostólico de Tucupita.
Linares y Robles fueron enviados por la diócesis de Cabimas a este servicio después de formar parte del Relevo Misionero, programa que adelanta OMP Venezuela. Este es un proceso de discernimiento y preparación, dirigidos al envío como misioneros Ad gentes a Iglesias locales del país, para vivir por un tiempo determinado con comunidades necesitadas de agentes de pastoral que compartan su fe, anuncien el evangelio y cooperen activamente en acciones solidarias con las poblaciones más vulnerables.
Durante estos dos años los jóvenes desarrollaron actividades de acompañamiento, evangelización, catequesis y refuerzo escolar para niños y jóvenes waraos, junto a religiosas Terciarias Capuchinas. Todo esto como parte de los programas que ellas llevan a cabo en San Francisco de Guayo, estado Delta Amacuro, con el apoyo de OMP.
El trabajo de las religiosas en esta misión comenzó en 1953, pero su presencia en el vicariato data de 1928, siendo la primera congregación misionera femenina en el mundo.
En la homilía el Pbro. Ricardo Guillén, Director Nacional de OMP Venezuela, resaltó el tránsito de los dos jóvenes por los diferentes servicios de animación misionera que se ofrecen las Obras y agradeció especialmente el apoyo y desprendimiento de Mons. Ángel Francisco Caraballo, obispo de la diócesis de Cabimas, al acompañar la labor misionera ad gentes en el país.